PES.- Mario Sandoval Figueroa, don Mario, periodista fundador de Prensa Libre y exponente de la poesía mística, falleció este viernes 27 de abril en Guatemala a los 93 años de edad.
Nacido en 1928, se graduó en la Escuela Centroamericana de Periodismo en 1953, y al año siguiente continuó su especialización en la Escuela Joseph Medill de Periodismo, de la Universidad Northwestern, en Illinois.
Don Mario fue dueño de una personalidad polifacética en el ámbito literario y poético, y su aportación más valorada es su participación en la fundación de Prensa Libre, junto a los periodistas Pedro Julio García, Salvador Girón Collier, Álvaro Contreras Vélez e Isidoro Zarco Alfasa, el 20 de agosto de 1951.
Fue cronista parlamentario en los primeros años de vida en ese diario, y de esa época se recuerda el galardón al Mejor Reportaje del Año que le fue otorgado por la Asociación de Periodistas de Guatemala (APG), de la que también fue cofundador, el 10 de abril de 1947.
Después, don Mario asumió la jefatura de Redacción de Prensa Libre, y desde ese puesto fue muy celoso del buen uso del español y de la objetividad y precisión en las noticias. Más tarde, asumió el puesto de gerente general, hasta su retiro en 1980.
Alternó su trabajo en el diario con la redacción de la columna de opinión Claraboya, en la cual analizaba la problemática nacional desde una perspectiva ética. Su creatividad periodística está guardada celosamente en la Hemeroteca Nacional, en forma de columnas de opinión, reportajes, crónicas parlamentarias, noticias y titulares escritos con singular maestría y con el cuidado de armonizar la belleza y certeza de la expresión española.
Escritor y poeta
Don Mario heredó la pasión por las Letras de su padre, el filólogo e ingeniero Lisandro Sandoval Chinchilla, autor del Diccionario de Raíces Griegas y Latinas y de Otros Idiomas del Español, y de un Diccionario de Guatemaltequismos. Él fue su fuente de inspiración para el inicio de su obra poética antes de la Revolución de Octubre de 1944.
Su producción literaria está recogida en siete libros de poemas, los cuales muestran la inspiración originada en su profunda fe religiosa, su innegable amor por los suyos y sus emociones de poeta. Dominó el soneto, la décima, el cuarteto y otras formas poéticas españolas clásicas, y practicó el verso libre.
De su temática religiosa se recuerdan los sonetos de primera comunión, dedicados a sus hijos y a sus nietos, y los poemas a la Virgen y al Niño Jesús, de esperada presencia en el día de Navidad de muchos años en las páginas de Prensa Libre, así como la letra de la marcha fúnebre Jesús del Consuelo, en honor de la imagen del mismo nombre venerada en el templo de La Recolección, y traída a Guatemala entre 1835 y 1840.
También fue amante de la fotografía, y en ese ámbito deja una valiosa colección de imágenes religiosas, retratos y flores.
Don Mario recibió la Orden del Quetzal, la Orden de San Silvestre y otros reconocimientos, de los cuales los últimos fueron otorgados el mes pasado por la Casa de la Cultura de Nueva York y la Biblioteca Walt Whitman, del IGA, y la Asociación de Periodistas de Guatemala, hace dos semanas, al cumplirse el 65 aniversario de esa entidad.
Ver video de Prensa Libre sobre las exequias:
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