Diana Vega (Andes/Télam).- El Dakar Perú-Argentina-Chile cumplió su octava etapa aunque incompleta, ya que los pilotos fueron sorprendidos por una brutal corriente de agua y barro, por lo que las autoridades de la prueba anularon 97 kilómetros de la especial.

De esta manera los registros dados a conocer por la tarde de este sábado quedaron sin efecto y, en horas de la noche, increíblemente, no había cronos oficiales.

La etapa del sábado, entre Salta y Tucumán, iba a tener inicialmente una especial de 492 kilómetros para motos y cuatris, 471 para autos y 155 para camiones. Las distancias sufrieron modificaciones anoche a raíz de la crecida de ríos.

Por esa razón, las autoridades de la prueba anularon la carrera de camiones y acortaron a 183 kilómetros la especial para motos, distancia que volvió a ser achicada esta tarde cuando varias motos y autos perdieron el rumbo complicados por la lluvia, primero, y la crecida del cauce del río que baja del Cerro Colorado, en la provincia de Catamarca.

Tras esa decisión, las autoridades decidieron tomar como válido el tiempo registrado por los competidores en el Way Point 9, uno antes de la meta -que muchos ya habían cruzado- y en el WP8 para motos.

El cambio en las clasificaciones de motos, cuatris y autos generó controversias, por lo que la dirección de la prueba y comisarios deportivos mantenían una reunión a puerta cerrada.

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